lunes, julio 30, 2007

Estudiar con hijos....

Me pregunto cómo demonios la gente saca la carrera en compañía de esos pequeños bichejos corriendo a tu alrededor... Cuando uno llega a casa, después de trabajar, mira los libros, estos a su vez, te miran desafiantes diciéndote: - "Hoy tampoco nos vas a coger, qué apostamos?"... Efectivamente, tu mujer cuando te ve, te cuenta todas las trastadas que ha hecho el niño durante todo el día y te lo cede cariñosamente mientras se va a seguir haciendo tareas de casa (estas madres no paran nunca!). El niño que tiene las pilas intactas, aprovecha para jugar contigo agotándote, si cabe un poquito más.... Luego cenas, mientras sigues pendiente del niño para que no haga alguna de las suyas... Por fin, su mami le lleva a la cama... Si quiere dormirse bien, si no, la típica lucha con él hasta que se consigue... Muchos días, dan las 23h...las 24h... En ese momento, vuelves a mirar a los libros... El punto de libro está en la misma página que ayer... Nadie ha estudiado por ti...Te animas, lo coges, le das caña, pero... Paras... Hay un ejercicio que no hay manera de igualar el resultado a lo que te dice el libro... Le das mil vueltas... Pasa una hora, el sueño es insoportable, no hay forma de concentrarse... Miras en Internet la web de la asignatura y te das cuenta de que hay una fe de erratas para ese libro de 28 páginas, y en una de ellas está tu querido ejercicio.... Un día perdido, y ya quedan menos para el examen....
Eso sí, habrá algo más bonito que oir a tu hijo reir o decirte "papá"?

5 comentarios:

Anónimo dijo...

No hay duda que estudiar en la UNED es una carrera de fondo pero aun más si lo haces con mujer/marido e hijos/as.
Personalmente opinio que en estas circustancias no hay que contar las veces que te tiran, si no las veces que te levantas.

Nemo dijo...

Yo estoy en tu caso, aunque mi planteamiento es un poco diferente. Te lo cuento por si te resulta interesante. Este año, como los anteriores, aprobé todo a la primera. En lugar de haberme matriculado de alguna asignatura esperando prepararla durante el verano, lo que hice fue decidir de qué asignaturas quería matricularme este año, y encargar los libros. Este verano, en lugar de haber estado estudiando alguna asignatura contra reloj, he estado preparándome las dos asignaturas de las que me voy a examinar en febrero. Según mis cuentas, tendré el temario acabado para dentro de un mes y medio, y entonces me dedicaré a repasar y a hacer una y otra vez los exámenes y cuantos ejercicios pueda conseguirme, mientras comienzo con lo que tengo previsto para el segundo cuatrimestre. ¿La diferencia? varias: estudio sin presión (muy interesante cuando lo que interesa es aprender), no agoto convocatorias (sabes que sólo corren al suspender en Septiembre), si se me complica la vida, o me surge algún plan de vacaciones, puedo aprovecharlo sin remordimientos, y si me equivoco con alguna asignatura (no es lo que creía, es demasiado dura o simplemente, no me apetece) pues no me matriculo y listos.
Bueno, que un abrazo, que yo soy seguidor asiduo de tu blog y de tus peripecias en las news (incluso cuando te cabreas con ese que vende libros), que yo también tengo niños (aunque mayorcitos ya) y que ánimo, que ya nos seguiremos viendo, por que me parece que llevamos una marcheta muy similar.

a dijo...

Gracias por vuestros comentarios, como le contaba ayer a mi mujer, la sensación de ver la nota de tu examen aprobado con la de trabas que tenemos a lo largo del año, es muy satisfactoria, y al final, valen más estos raticos, que las penas que puedas pasar a lo largo del año. Ánimo y suerte a vosotros también. Por otro lado, nemo, agradecerte que sigas mis parrafadas, jeje. Saludos.

Vejeta dijo...

Para saber de cuantas matricularme, me gustaria preguntarle a los que ya tienen experiencia.

?Cuantas horas le dedicais al dia a cada asignatura? Me gustaria saber de cuantas podria matricularme sabiendo que trabajo y no dispongo de todo el dia.

Menos mal que he encontrado esta pagina!

Xosé Manuel Carreira dijo...

No es imposible pero con empleo en empresa privada, mujer e hijo hay que hacer números con el tiempo.

A mí me han llegado muchas veces la una, las dos y las tres de la mañana delante de los libros y al día siguiente a levantarse a las 7:00.

Mucho ánimo.